La compañía contaba con proyectos en los departamentos de Santander y Cundinamarca.
La constructora colombiana que se encuentra en reorganización tras enfrentar problemas financieros. | Foto: Getty Images Las constructoras no han tenido su mejor racha durante los últimos años en Colombia. El sector vivienda ha sido uno de los que más ha caído en la economía nacional. La modificación de los subsidios de Mi casa ya, además de las elevadas tasas de interés que tienen los bancos por estos días, no ha traído buenas cifras para las empresas encargadas de edificar inmuebles.
De hecho, desde hace algunos meses, la Cámara Colombiana de la Construcción (Camacol) ha venido advirtiendo sobre las cifras en rojo que registra el sector. En los primeros dos meses del año, las ventas de vivienda registraron una caída del 24,5 % y la comercialización de viviendas de interés social se redujo un 22,5 % y acumuló 20 meses en terreno negativo.
Recientemente, se conoció una nueva decisión que tomó la Superintendencia de Sociedades frente a una empresa de construcción que entró en un proceso de reorganización empresarial, tras registrar pasivos considerablemente altos que no le permitían seguir operando con normalidad.
La Superintendencia de Sociedades informó a través de un comunicado que, en la audiencia celebrada el pasado 18 de marzo del 2024, se confirmó el acuerdo de reorganización, en los términos de la Ley 1116 de 2006, de la constructora David Puyana S.A., más conocida como Urbanas S.A.
Este acuerdo le permitiría a la empresa continuar con el desarrollo de sus proyectos comerciales y garantizar la generación de empleo en los departamentos de Santander y Cundinamarca.
La Supersociedades también aseguró que la sociedad en mención inició el proceso recuperatorio el pasado 9 de abril del 2019, con pasivos por cerca de $ 385.439.880.000. En el acuerdo de reorganización, se reestructuró un pasivo por una suma de $ 119.121.459.226. Durante el avance de este proceso, se atendieron oportunamente los gastos de administración y se disminuyó además parte del pasivo reorganizable, como síntoma de su recuperación financiera.
Con optimismo, vemos que los procesos concursales son de gran utilidad para el empresariado colombiano, quienes bajo el acompañamiento de la Superintendencia de Sociedades logran su recuperación económica, que les permite seguir aportando al desarrollo nacional y, especialmente, a la generación de empleo”, comentó el superintendente de sociedades, Billy Escobar.
Camacol advierte que es importante aumentar el inicio de obras
La entidad aseguró que la reducción en los niveles de actividad limita la capacidad del sector para atender el déficit habitacional, traducido en la falta de vivienda para familias, lo que se traduce en una mayor informalidad en las ciudades. Por ello, incrementar los niveles de obra es fundamental para garantizar un desarrollo urbano acorde a las necesidades de la población.
Guillermo Herrera, presidente ejecutivo de Camacol, aseguró que un país con la dinámica poblacional de Colombia requiere de un sector constructor que tenga la capacidad de superar las 250 mil viviendas iniciadas por año. Sin embargo, la cifra actualmente se ubica por debajo de las 130.000 unidades.
Esa cifra es insuficiente para cubrir la formación de hogares, que se estima en cerca de 370.000 por año. Además, es clave atender el déficit cuantitativo de vivienda, que afecta a cerca de 1,3 millones de hogares.
Una población dinámica requiere de un sector de la construcción que amplíe su producción en el tiempo y de instrumentos de política que permitan que cada vez más colombianos puedan ser propietarios”, declaró Herrera, quien además declaró que Colombia necesita aumentar la inversión pública en vivienda como porcentaje del gasto social, en lugar de limitarlo.
Finalmente, el dirigente gremial aprovechó para destacar el papel de los empresarios de la construcción y la amplia oferta de vivienda en el país, que hoy registra cerca de 170.000.
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