Lo que se inició como un almuerzo protocolario se transformó en una jornada de casi una tarde, durante la cual el presidente Gustavo Petro se reunió con los presidentes y dueños de los principales grupos económicos del país. Figuras influyentes como Luis Carlos Sarmiento Angulo, con una fortuna estimada de US$6.180 millones, y Alejandro Santo Domingo, cuya fortuna se estima en US$12.700 millones, se sentaron a la mesa junto a otros líderes empresariales, incluyendo a Carlos Julio Ardila.
Foto: Presidencia.
La agenda del encuentro incluyó discusiones sobre temas cruciales que afectan la economía colombiana, siendo el reciente dato de la caída del PIB (-0,3%) uno de los puntos destacados que generó inquietud entre los empresarios. El presidente Petro recibió las preocupaciones del empresariado, abordando temas como el acceso a tierras y el desarrollo de la empresa privada.
Desde Luis Carlos Sarmiento Gutiérrez, presidente del Grupo Aval, hasta Alejandro Santo Domingo, heredero y líder de la familia Santo Domingo, compartieron sus perspectivas sobre la situación económica y expresaron sus inquietudes. La reunión, coordinada por Laura Sarabia, directora del Departamento de Prosperidad Social, y Juan Fernández, consejero de la Presidencia en temas empresariales, contó también con la participación del ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, y el superintendente Financiero, César Ferrari.
Al finalizar el encuentro, el presidente Petro destacó que esta fue la primera reunión de este tipo con los grupos empresariales más destacados del país. Resaltó que se trabajó hacia "un acuerdo nacional sobre temas como la educación, la productividad, el desarrollo productivo de la tierra, el empoderamiento de la economía popular, la inclusión financiera y la inclusión territorial con énfasis en el Pacífico, La Guajira y la Orinoquía colombiana".
El mandatario señaló que la educación fue uno de los temas centrales de la reunión, destacando su papel fundamental en la productividad. Expresó la necesidad de que la economía colombiana entre en un camino donde las ganancias estén vinculadas al crecimiento de la productividad, subrayando la importancia de una educación de calidad que alcance a todo el territorio nacional.
El desarrollo productivo de la tierra también fue un punto crucial de discusión. El presidente enfatizó la necesidad de cambiar el paisaje de grandes extensiones de tierra fértil sin producción, buscando aprovechar el potencial de la fuerza laboral mediante la producción en tierras fértiles.
Además, se abordaron temas relacionados con la economía popular, que el presidente Petro enfatizó debe ser empoderada mediante el crédito y el conocimiento. Destacó la inclusión en el sistema financiero como una herramienta esencial para acabar con la desigualdad social y la pobreza.
Este encuentro se produce en un momento de preocupación creciente entre los empresarios, como lo refleja la reciente disminución en la confianza inversionista medida por Fedesarrollo. La economía colombiana, que registró una caída del 0,3% en el tercer trimestre, ha generado llamados de los gremios empresariales, como Andi, Fenalco y Camacol, para implementar un plan de reactivación.
En su discurso posterior al encuentro, el presidente de Colombia subrayó la necesidad de seguir construyendo diálogos permanentes con todo el empresariado, con el objetivo de "construir los bienes comunes, los objetivos comunes que nos permitan colocar a Colombia en los rieles de la paz, del desarrollo de una profunda democracia". Este llamado a la colaboración nacional apunta a construir un consenso que beneficie tanto a empresarios como a trabajadores, con miras a un futuro de prosperidad y estabilidad para Colombia.
Fuente: La República.
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