En fechas recientes, la Ministra de Trabajo, Gloria Inés Ramírez, afirmó que la discusión para determinar el salario mínimo de 2024 se basará en el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de noviembre.
Se espera que este indicador vuelva a disminuir desde la cifra mencionada, situándose alrededor del 10%. Con estas proyecciones, se estima que el aumento del salario mínimo para el próximo año oscilará entre el 9% y el 12%, según algunas estimaciones de analistas económicos, mientras que los sindicatos plantean un rango entre el 10% y el 13%.
Adicionalmente, los sindicatos consideran esencial discutir aspectos como el precio de la gasolina y la canasta básica para preservar el poder adquisitivo de los ciudadanos. Fabio Arias, presidente de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), expresó que el incremento debería superar los dos dígitos, argumentando que "la inflación va a ser de dos dígitos, por más que el dato baje. No caerá a más de 10%".
En este contexto, Arias anunció la intención de los trabajadores de llegar a la mesa de concertación con una oferta conjunta entre las centrales obreras y los pensionados. "Vamos a hacer una reunión con las otras dos centrales y también los pensionados para ponernos de acuerdo y el día que nos corresponda en el cronograma que se apruebe, manifestaremos nuestras condiciones concretas sobre el tema del salario mínimo", señaló.
El dirigente sindical enfatizó que el aumento salarial debe ir acompañado de un control mínimo sobre factores que afectan el deterioro de los salarios, como la tasa de interés, la tarifa de los servicios públicos y el incremento de la gasolina.
Por su parte, Miriam Luz Triana, presidenta de la Confederación General del Trabajo (CGT), sugirió que el incremento del salario mínimo debería ser del 10% más tres puntos, alcanzando así el 13%. Aunque a falta de un estudio definitivo, subrayó la importancia de que el aumento salarial mantenga el costo de la canasta familiar.
En cuanto a las perspectivas de analistas económicos, se plantea que el aumento del salario mínimo estará en el rango del 9% al 12%, considerando la inflación proyectada para el cierre del año y la disminución de la productividad del país. Juan David Ballén, director de análisis y estrategias de Casa de Bolsa, estima que el aumento podría situarse alrededor del 10%, mientras que Andrés Langebaek, director ejecutivo de Estudios Económicos del Grupo Bolívar, sugiere un incremento del 11,3%.
En conclusión, la discusión sobre el salario mínimo en Colombia para el año 2024 se centra en el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de noviembre, con expectativas de un aumento que podría oscilar entre el 9% y el 13%. Mientras analistas económicos proponen cifras más bajas, los sindicatos abogan por incrementos de dos dígitos, argumentando la necesidad de preservar el poder adquisitivo de los trabajadores.
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